Las notificaciones mataron nuestra concentración. Ahora están secuestrando nuestros móviles
Desde hace más de década y media, las aplicaciones de nuestros móviles son máquinas perfectas de chuparnos el tiempo que nos enganchan con técnicas como el scroll infinito. Hemos acabado con una generación que vive desconcentrada incluso cuando no recibimos notificaciones relevantes del trabajo, escuela, amigos o familiares.
Y ese es precisamente uno de los grandes problemas al que nos enfrentamos hoy en día: una cantidad ingente de notificaciones inútiles, irrelevantes y en muchos casos ab…